El tenista argentino Leonardo Mayer triunfó sin contratiempos en su presentación en el Abierto de Niza, luego de imponerse al francés Lucas Pouille, por parciales de 6-4 y 6-0 y su próximo oponente será su compatriota Juan Mónaco.
El correntino, cuarto cabeza de serie, frenó al joven local en una hora y 14 minutos de combate, sin dar mayores oportunidades de mostrar el talento que recientemente lo impulsó a irrumpir en el “top 100” mundial.
Con ventaja de 4-3 en el primer set, “Leo” escapó de las dos veces que su servicio estuvo al límite y de ese “game” en adelante tuvo vía libre para consumar su éxito en segunda ronda, que para él representó su debut en la Costa Azul, tras ahorrarse la primera fase por preclasificación.
Para cuartos de final se medirá a “Pico”, octavo en la siembra, en un enfrentamiento cuyo historial favorece al tandilense 2-0, incluso el enfrentamiento en Buenos Aires a principios de temporada, un torneo que también se disputó en canchas de tierra batida.
Otro que se presentó en la programación de este miércoles fue el letón Ernests Gulbis, campeón defensor que por fin se reconcilió con la victoria, luego de acumular marca de 1-11 en el año.
El temperamental Gulbis disparó 14 “aces” durante las más de dos horas que peleó contra el ucraniano Alexandr Dolgopolov, a quien eliminó al son de 7-5, 4-6 y 6-1, en busca de revertir su mal paso y evitar descender más peldaños en el escalafón internacional, del que llegó a ser décimo y ahora es el 25. Notimex.