Villahermosa, Tabasco.- El gobierno de Tabasco a cargo del gobernador Carlos Manuel Merino Campos, a quien dejó en su lugar el actual secretario de Gobernación y aspirante presidencia de Morena, Adán Augusto López Hernández ordenó una feroz represión contra el magisterio local que reclama un incremento salarial anunciado el 15 de junio pasado.
La brutal represión con policías antimotines ocurrió en la tierra natal del presidente Andrés Manuel López Obrador. Donde pese a todos sus anuncios de que vamos bien, el gobierno de Tabasco había comunicado a los docentes que carece de recursos para el pago prometido y anunciado el Día del Maestro.
Este día un grupo de maestros se apostó frente a la sede del Poder Ejecutivo, por segunda vez en esta semana, para exigir al gobernador Carlos Manuel Merino Campos, cumpla con el pago del aumento salarial, pero por segunda vez tampoco los atendió.
Los funcionarios que atendieron a los inconformes les respondieron que la Secretaría de Finanzas no cuenta con el dinero para poder cumplir con esa obligación.
Los líderes sindicales, casi todos vendidos al gobierno de Morena en turno, han estado callados y no se han sumado a la protesta magisterial.
Los docentes bloquearon la avenida 27 de Febrero; una de las más importantes de Villahermosa, que comunica al centro de la ciudad y se ubica atrás de la sede del poder Ejecutivo local.
Los maestros advirtieron que mantendrían el bloqueo aunque les enviaran a grupos antimotines de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del estado (SSPCT).
Ante la advertencia magisterial, el gobernador envió a un centenar de policías antimotines con cascos, escudos y bastones los desalojaron de la vialidad y encapsularon fuera de la avenida.
Antes, los trabajadores de la educación de Tabasco acudieron al Congreso Local para solicitar apoyo en su lucha por el pago del retroactivo, pero encontraron vacío el recinto legislativo, pues los diputados de encuentran en receso.
Los manifestantes reiteraron que el aumento salarial que cada año se les otorga comúnmente el Día del Maestro, y siempre se refleja en la segunda quincena de junio o en la primera de julio, pero ahora no ocurrió así y existe la incertidumbre de la fecha que se les pagará.
El pasado 15 de junio, en el edificio de la SEP de la Ciudad de México, Delfina Gómez anunció, ante líderes sindicales y del presidente López Obrador, que se otorgaría un incremento aproximado de 7.5 por ciento, lo que consolidaba “el compromiso del gobierno de México con la seguridad y el bienestar del magisterio nacional”.