La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) acogió con beneplácito la llegada, la noche del jueves, del primer grupo de refugiados sirios a Canadá.
El grupo de 163 personas llegó desde Líbano en un vuelo de la Fuerza Aérea canadiense, según un plan anunciado en noviembre pasado por ese país para acoger a 25 mil refugiados sirios, dijo el portavoz del ACNUR, Adrian Edwards, en rueda de prensa en Ginebra.
Edwards destacó la rapidez con que Canadá implementó la iniciativa y señaló que la Agencia seguirá trabajando con las autoridades de ese país en la identificación y evaluación de solicitantes de asilo vulnerables para su reubicación en territorio canadiense.
Los sirios que lleguen a Canadá participarán en programas de integración a las comunidades donde vivirán.
“Los programas canadienses son una expresión práctica de apoyo a los refugiados sirios y muestran la solidaridad del país americano con las naciones de la región que acogen a más de cuatro millones de esas personas”, señaló.
“La difícil situación de los refugiados sirios continúa deteriorándose y cada vez aumenta más el número de los que viven por debajo de la línea de pobreza”, apuntó Edwards.
El portavoz agregó que la Agencia de la ONU insta a otros Estados a implementar este tipo de programas.
Hasta el momento, unos 30 países se han comprometido a recibir a más de 160 mil sirios.
Según ACNUR, el 10 por ciento de los 4.1 millones de refugiados registrados en los países vecinos de Siria se encuentran en una situación vulnerable y precisan ser reubicados o admitidos por razones humanitarias en un tercer país.
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