El especialista Juan Carlos Pérez Barba dijo que las dosis farmacológicas que se indican a pacientes con menopausia son seguras, no provocan cáncer de mama, contrario a lo que refiere el mito popular.
El encargado de la Clínica de Climaterio y Osteoporosis del Hospital de Ginecología y Obstetricia en Jalisco añadió que hace poco más de 10 años comenzaron a circular una serie de rumores en los que se sostenía un vínculo directo entre tratamientos hormonales y cáncer, pero no había detrás algún sustento científico.
Indicó que a una década de distancia es posible aseverar que las pacientes en esta etapa de la vida pueden seguir su tratamiento sin preocupaciones.
Señaló que los especialistas “llevamos ya un tiempo luchando mucho contra esta idea. En todo el mundo no existe un estudio formal que demuestre que el cáncer es una consecuencia de la sustitución de estrógenos”.
“Debemos siempre basarnos en evidencias y sobre todo comprender que los padecimientos oncológicos son multifactoriales”, apuntó.
Mencionó que una mujer que fuma, por citar un ejemplo, tiene siete veces más probabilidades de desarrollar un cáncer ginecológico, además intervienen elementos ambientales y genéticos, sumados a la falta de ejercicio y al régimen alimenticio que se siga a lo largo de la vida.
“La terapia de estrógenos mejora hasta 95 por ciento los síntomas de la menopausia en un periodo aproximado de 15 días, cada paciente es distinta y como equipo analizamos su caso, para determinar cuál será la dosis y por cuánto tiempo se seguirá el tratamiento, aunque el promedio son cinco años”, afirmó.
Recomendó a la población acudir al especialista en cuanto se manifiesten los primeros síntomas característicos de la menopausia, como los bochornos o sensaciones de calor, que van del abdomen a la cabeza.
Asimismo, pidió abstenerse de tomar medicamentos que no estén prescritos específicamente para la paciente, ya que existen al menos 20 tipos de terapia hormonal que se colocan como “un traje a la medida”.
