Guerrero.- El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza y pidió que no haya “madruguete” ni tampoco que se utilicen “encuestas acomodadas” para aprobar la despenalización del aborto en Guerrero.
El obispo mostró su desaprobación con la iniciativa presentada en el Congreso local para despenalizar el aborto cuando en Guerrero no hay ni una sola mujer sentenciadas por ese hecho. Afirmó que esa iniciativa es una copia de una agenda internacional que sirve a grandes consorcios “que viven de la muerte y que viven del aborto”.
“Guerrero siempre ha sido un estado violento, sufrimos consecuencias de asesinatos, y si le sumamos esos asesinatos de abortos a dónde llegara la sociedad. Tenemos que fomentar valores para salvar a la sociedad”, dijo.
El obispo exhortó “a que no sigan promoviendo, porque yo sé que atrás de esto hay muchos intereses políticos, muchos intereses económicos (…) Aquí en Guerrero qué necesitamos para estar matando niños, no es necesario, como yo les decía, lo que se quiere aprobar ahora es la despenalización del aborto, esa despenalización se puede condonar con otra sentencia como trabajos comunitarios o económicamente, pero no matar niños, si quieren matar niños para hacerse, dar a conocer, esta señora Beatriz Mojica en cuántos partidos no ha andado, Movimiento Ciudadano, en PRD, en Redes, en el PAN y ahora cayó en Morena, entones, son de esos chapulines que nomás andan buscando la notoriedad y quedar bien con sus jefes, y quien sabe que intereses haya detrás”, señaló.