Francia.- Un brutal atentado dejó claro este jueves a los franceses que la amenaza extremista sigue presente. Francia está de nuevo en estado de alerta terrorista máxima, tras el asesinato de tres personas en una iglesia en Niza, en un ataque con cuchillo reivindicado por su autor, un inmigrante irregular de origen tunecino que asumió la agresión como un acto islamista cuando fue detenido.
En una jornada negra, la policía redujo a otro hombre en Lyon armado con un cuchillo y en Yeda (Arabia Saudí), un vigilante del consulado francés fue atacado con arma blanca. “Claramente, es Francia la que está siendo atacada”, declaró el presidente, Emmanuel Macron.
Ese atentado sobrecogió a una Francia que desde entonces ha sido objeto de protestas y boicots desde varios países musulmanes por su defensa del derecho a publicar caricaturas de Mahoma —o de otros símbolos religiosos— en aras de la libertad de expresión y a la blasfemia.
El modo de proceder en Niza recordó rápidamente el ataque a Paty. El agresor, cuyo rastro fue detectado por primera vez por cámaras de videovigilancia a las 6.47 de la mañana en la estación de tren de Niza, donde hizo un cambio de vestimenta, entró en la iglesia, situada a unos 400 metros de distancia, a las 8.29 de la mañana.
Durante la escasa media hora que permaneció en su interior, atacó a tres personas. Cerca de la entrada, el atacante degolló a una mujer de 60 años, a la que, según explicó el fiscal antiterrorista, Jean-François Picard, intentó decapitar.
El atacante mató también a otro hombre, el sacristán de la iglesia, mediante una “profunda herida en el cuello” antes de ser neutralizado por los policías que acudieron al lugar y que lo redujeron tras abatirlo a balazos, dejándolo herido grave. Una tercera víctima, una mujer de 44 años que logró huir hasta un bar cercano, pereció por “múltiples heridas de arma blanca”.
Picard confirmó que el agresor, que permanece en un hospital, gritó al enfrentarse a los agentes allahu akbar (Alá es grande). En la iglesia, los investigadores hallaron una bolsa con pertenencias del agresor, entre otros un corán y otros dos cuchillos además del de 30 centímetros con el que perpetró el ataque. La Fiscalía Antiterrorista abrió una investigación por “asesinato con fines terroristas”, entre otros cargos.
El autor del atentado terrorista de la basílica de Niza fue identificado como Brahim Aoussaoui, un joven de 21 años de origen tunecino que ingresó a Europa a través de la isla italiana de Lampedusa hace solo unas semanas.
Tras su llegada a suelo italiano, Aoussaoui fue puesto en cuarentena por las autoridades y luego liberado con una orden de salir del país. Según reportó la agencia AFP, llegó a Francia a inicios de octubre.
El atacante fue neutralizado por la policía con un disparo. En sus primeras declaraciones, según trascendió en la prensa francesa, aseguró haber actuado solo en el atentado en el que asesinó a tres personas.
NUEVO CONFINAMIENTO
Cientos de personas intentan salir de París, Francia, antes del cierre total por el aumento de casos de Covid-19. En otras ciudades de Francia Reportan protestas por el cierre y otras medidas.