México.– El presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo en Guerrero donde como era de esperarse hizo anuncios espectaculares, lanzó elogios adelantados a la nueva gobernadora que llegó al poder “haiga sido como haiga sido”, y escuchó la larga lista de los enormes beneficios que el gobierno de la 4t hace en Guerrero para luego marcharse, dejando una cruda social, donde la realidad cotidiana causa estragos.
Sucede que el ya anciano presidente, no sé porque su imagen recuerda a don Porfirio, quedó impresionado con el discurso de lugares comunes y obviedades políticas que hizo la gobernadora guerrerense, quizá porque siguió el consejo de Félix, su apá, que le habrá dicho: habla de lo que quiere escuchar y te lo echas a la bolsa, y así fue, por eso la gobernadora enfatizó en su discurso durante la presentación del “Plan de Apoyo a Guerrero”, que “implementará” (aplicará) una política de cero tolerancia a la corrupción, cero privilegios, cero derroches y gastos innecesarios, “vamos a implementar (sic) medidas de austeridad”.
Pues bien, todo esto es solo retórica política, el supuesto compromiso con la corrupción no pasará de ese mensaje, pues como se puede confirmar, la corrupción y la quiebra estatal en la que recibió el gobierno de manos del exgobernador Héctor Astudillo Flores, quedará en la impunidad. Este simple hecho de no llamar a cuentas a Astudillo a cambio de la ayuda recibida, contradice todo lo que dice la jefa del Ejecutivo local, de cero tolerancia a la corrupción, cero privilegios, cero derroches y demás, pues el gobierno que recibe acusa un daño enorme a la hacienda pública. Astudillo dejó endeudado por 30 años a Guerrero.

En concordancia con la simulación, decir una cosa y hacer otra. Evelyn Salgado no ha informado a los guerrerenses cómo recibió el gobierno, en qué condiciones le dejaron la hacienda pública, las deudas, cómo está el equipamiento y demás cosa pública.
Es como si los guerrerenses fueran estúpidos y no merecieran saber eso. La corrupción de un gobierno comienza con la opacidad y la simulación como regla. Es decir, ocultar la información a los ciudadanos. En un gobierno democrático no existe información secreta, todo es público pues quienes pagan los salarios de los funcionarios es la gente. Los ciudadanos son los dueños del gobierno pero es a los que menos se les informa.
El trato de estúpidos que el nuevo gobierno de Guerrero da a los ciudadanos, contrasta con la retórica barata de López Obrador al afirmar que “el pueblo de Guerrero es bueno, trabajador e inteligente”, pero dijo eso solo para crear la justificación para afirmar una idiotez: “y esto último se acaba de volver a demostrar porque eligieron a una muy buena gobernadora”, dijo en su afán manipulador.
Así de profundo son los “cambios”, y este nivel de manipulación, de simulación, es lo que está dominando en la cuarta transformación, se dice una cosa y se hace otra.
En ese evento, la gobernadora Evelyn, dijo una revelación, que “gobernar Guerrero no es fácil”. Y afirmó otra más de las cosas que le gustan a Obrador, dijo que trabaja arduamente bajo los principios de no robar, no mentir y no traicionar, por el bienestar y el progreso del estado. Vamos a transformar Guerrero, esta es una oportunidad de servir, no de servirnos”. Todas son palabra de López Obrador.
Y para orgullo del anciano presidente, la gobernadora destacó que su gobierno “ha articulado una eficiente política de austeridad y combate a la corrupción”. Algo que es absolutamente imposible pues apenas lleva menos de 15 días, y aun no informa cómo recibió uno de los gobiernos más corruptos del sur de México.
El mensaje fue para endulzar los oídos presidenciales, pues dijo “definitivamente hay que arrancarlo (la corrupción) de raíz, porque esa es la madre de todos los males y este debe ser el eje rector de todo gobierno. Tenemos que ser austeros hacia dentro, amarrarnos el cinturón para poder ser generoso y solidarios hacia fuera. No puede haber gobierno rico y pueblo pobre”. Todas son palabras del propio Obrador, ninguna salida de su propio recurso mental y convicción propia.
Frente al AMLO, nuevo amigo de la mafia del poder que hizo de México territorio Telcel, pero que ya no, la gobernadora se comprometió a realizar un análisis de las listas de raya, para transparentar y que el pueblo sepa cuánto está ganando cada funcionaria y cada funcionario; indicó que no se renovarán las contrataciones de 114 vehículos blindados, cuyo pago ascendía a 30 millones de pesos.
En principio eso se oye como bien. Pero la transparencia sobre los sueltos de funcionarios no es producto de una voluntad, es una obligación de ley, solo que nadie la hace valer. El gobierno federal y muchos gobiernos estatales tienen ya aplicaciones en la red donde se transparenta la nómina, no hay ninguna razón lógica, sensata para que el gobierno oculte a los ciudadanos esta información, ni tampoco para venderla como si fuera la voluntad de un gobernante.
Sobre la renta de 114 vehículos blindados, eso es parte de las cosas que se ocultan a la gente como si no tuvieran derecho a saber. Pero en lugar de no recontratar ese servicio, se debe investigar por qué se hizo un contrato tan oneroso y deslindar responsabilidades penales por daño a la hacienda pública.
La mandataria estatal también dijo que se revisarán los inmuebles rentados mensualmente, para verificar la necesidad de utilizarlos, “los automóviles y camionetas blindadas, serán subastadas para eliminar los gastos de mantenimiento y seguro; no más gastos onerosos en comidas de funcionarios en restaurantes lujosos, quienes gusten asistir será con su salario no con el dinero del pueblo”, aseveró.

Hasta ahora, todo esto son solo anuncios que no hay que tomar en cuenta ni darles ningún valor, lo real es cuando el hecho ocurra, cuando se vea, sin alardes publicistas, que ya se vendieron esos autos, que ya se dejó de pagar esas rentas, que ya no se dan viáticos, y que el resultado de todo eso se transparenta, luego entonces se podrá decir, “es cierto”, hay cambio. Mientras, no se puede dar un ‘cheque en blanco’ a un gobierno estatal que ni siquiera ha transparentado el proceso de entrega recepción.
Al igual que lo hizo Abelina López en Acapulco, Evelyn asegura que se acabaron “los moches, no diezmos, la prácticas clientelares; se cumplirán los reglamentos de adquisiciones y de licitaciones, para obtener beneficios con más obras y servicios para el pueblo”. Lo cual, al igual que con Abelina que puso en la obra pública a una funcionaria corrupta y rapaz, no se puede dar por válido estos anuncios, porque en los hechos la cosa es distinta y con el correr del tiempo se irá demostrando lo que ya todos sabemos.
Una de esas trampas de la propia palabra, fue ese anuncio que hizo la alcaldesa de Chilpancingo de que para la adquisición de camiones de basura haría una licitación pública nacional, no lo hizo y ya le entregó el contrato por adjudicación directa a algún “benefactor”, pues anunció que ya pronto llegarán los nuevos camiones, es lo mismo que hizo Abelina en Acapulco.
Entonces, como dice Evelyn Salgado: “Esto es la cuarta transformación, transformar desde la raíz, quitar todo lo que ha hecho tanto daño a nuestro pueblo de Guerrero. Nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador nos ha enseñado que siempre la cercanía con el pueblo, la austeridad, el trabajar de manera incansable todos los días y el poner toda la voluntad, todo el amor, toda la pasión, por servir y no por servirnos, ese siempre va a ser el camino de la transformación, del desarrollo y del bienestar para nuestro México y para nuestro Guerrero”. Bueno, hay que ver.
De refilón
Y ya por último está el asunto del culto a la personalidad. Hay que ver los boletines de prensa del nuevo gobierno estatal de Morena para constatar que es la misma forma de pensar subnormal que había con Astudillo, la misma conducta rastrera hacia la imagen del gobernante instaurada por el priismo.
No hay comunicación de la 4T. Son boletines vomitables en el sentido de la dignidad. Nadie con el mínimo de sentido común puede leer ese tipo de “información”. En cada párrafo un elogio, una mención a la “primera gobernadora”, hay un ansia de aparentar, un ansia de reconocimiento aún no ganado. Quienes construyen ese tipo de productos no tienen idea de lo que es la comunicación institucional, ni de la dignidad del ciudadano. Lo mismo ocurre en Acapulco, Chilpancingo, Iguala, en todas partes, es la misma escuela mal hecha. No hay que romperse el seso, solo basta que volteen a ver como construye sus boletines la presidencia de la República, son boletines para informar acciones de gobierno como marca la ley, no para promover la imagen de un político como se pretenden hacer en Guerrero sin resultado, pues esos boletines son tan malos que nadie los lee.
No está demás que los encargados de la comunicación social en Guerrero lean la Ley General de Comunicación social que aplica para todo el país, texto vigente aprobado el 11 de mayo de 2018, con énfasis en los artículos 8 y 9, éste último señala:
Artículo 9.- Además de lo previsto en el artículo 21 de esta Ley, no se podrán difundir Campañas de Comunicación Social, cuyos contenidos:
1.- Tengan por finalidad destacar, de manera personalizada, nombres, imágenes, voces o símbolos de cualquier servidor público, con excepción de lo previsto en el artículo 14; relacionado a los informes de labores…
De acuerdo con la normatividad financiera y contable, el gasto en comunicación social son todas aquellas asignaciones de recursos destinadas a la difusión de mensajes y campañas para informar a la población sobre el quehacer gubernamental en general, no para promover a un gobernante. En otras palabras, no contempla la promoción ni propaganda personal de funcionarios públicos o políticos.
El párrafo octavo del artículo 134 de la Constitución prohíbe “bajo cualquier modalidad de comunicación social […] que difundan […] nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”. Interpretar de cualquier otra manera este precepto, significa una violación a la ley y la propia Constitución, y cualquier ciudadano puede demandarlos con solo presentar como prueba los boletines y capsulas de video.