Guerrero.- Dos de los 14 candidatos del PRI a una diputación federal por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), han sido señalados por sus presuntos nexos con grupos de la delincuencia organizada que operan en el estado de Guerrero.
Se tratan de: Adolfo Torales Catalán, presidente municipal de Arcelia, en la región Tierra Caliente de Guerrero y Jesús Parra García, presidente municipal de Chilapa de Álvarez, en la región Centro del estado.
Adolfo Torales, ha sido señalado de vínculos con el grupo delictivo de La Familia Michoacana, que opera principalmente en la región de Tierra Caliente de los estados de Guerrero y Michoacán.
En 2018, Adolfo Torales, se sumó al grupo de presidentes municipales de Tierra Caliente, que denunciaron abuso por parte de los presuntos policías comunitarios de Teloloapan; los comunitarios señalaron a los alcaldes de relaciones con el narco.
Por otra parte, Jesús Parra García, presidente de Chilapa, ha sido relacionado con la banda de Los Ardillos, presuntamente dirigida por Celso Ortega Jiménez.
Recientemente el alcalde priista fue señalado de vínculos con dicho grupo criminal, acusación que realizaron 22 comunidades indígenas de la región Montaña Baja.
El año pasado, el colectivo de desaparecidos Siempre Vivos, advirtió que dicho grupo criminal, tendría una fuerte injerencia en los próximos comicios e incluso impondrían alcaldes y otros cargos de elección popular en esa zona del estado.