Guerrero.- Municipios de Guerrero históricamente controlados por el crimen organizado, como el caso de Iguala y Petatlán, no representaron un foco rojo en el tema de violencia en el primer semestre del 2017, informó el Semáforo Delictivo.
El Semáforo Delictivo que aporta resultados emanados de la información pública del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), reportó reducidas conductas de violencia, salvo algunos delitos, en municipios que son señalados con alta injerencia de estructuras criminales.
Algunos de los municipios que ni siquiera representan una alerta en el tema de homicidios dolosos y que, en contraparte, mantienen una fuerte presencia de grupos del narcotráfico, son: Iguala, Teloloapan, Petatlán, Tixtla, Tlapa y Eduardo Neri.
Iguala, controlado de manera histórica por Guerreros Unidos, celula de Los Beltrán Leyva acusada de la desaparición de los 43 estudiantiles de Ayotzinapa, así como de asesinatos y desapariciones en la región Norte, no representó problemas graves de homicidios, extorsiones y secuestros.
Este municipio de la región Norte, fue bastión de esa célula criminal, y a pesar de la fractura interna, mantienen el control del trasiego y venta de droga junto con otros municipios de la zona.
En esa misma región, aparece el municipio de Teloloapan, en los límites de Tierra Caliente. Desde 2015, se conformó allí el grupo de autodefensa “Tecampanera”, acusados de ser un brazo armado de Guerreros Unidos.
Hasta finales del 2015, en este municipio había una fuerte confrontación entre Guerreros Unidos y la Familia Michoana, encabezada por Jonhy Hurtado Olascoaga, no obstante, tras el arribo de los presuntos comunitarios, Teloloapan no presenta signos graves de violencia, de acuerdo a los datos del Semáforo Delictivo.
Otro de los municipios sin afecciones graves por el tema de inseguridad, es el de Petatlán, en la Costa Grande de Guerrero. Allí, el Semáforo Delictivo solamente alertó sobre el robo a casa habitación durante el primer semestre del año.
Petatlán es controlada por la banda delictiva “Los Granados”, que dirige Salvador Granados y su hijo de apodo “El Nene”, capturado y dejado en libertad este mismo año.
Desde el 2008, una alianza entre el Cartel de Jalisco Nueva Generación y Los Granados, desplazaron a Los Caballeros Templarios que trataron de ingresar a la Costa Grande de Guerrero; desde entonces mantienen el control de la siembra y trasiego de enervantes.
Tixtla de Guerrero, en la zona Centro del estado, es otro de los municipios con mínimo rastro de violencia a pesar del fuerte enfrentamiento que desde el 2015 mantienen la banda delictiva de Los Jefes (antes Rojos) y Los Ardillos, presuntamente encabezados por Celso Ortega Jiménez.
El informe arroja que solamente hay una alerta por el tema de secuestros, en el municipio que, hasta principios del siglo, era dominado por Los Rojos que extendieron su dominio hasta la Montaña pero fueron desplazados con el avance de la banda de Los Ardillos.
Tlapa, ha sido conocido ampliamente por la presencia de Los Rojos que han mantenido el dominio de “la plaza” hasta inicios de este año con la llegada de un nuevo grupo, presuntamente el CJNG.
Sin embargo, el resumen arroja únicamente incremento en rubros de violencia menor.
Por último, el municipio de Eduardo Neri, entrada a la Sierra de Guerrero, no representa un foco rojo en el tema de homicidios dolosos, siendo este uno de los pasos principales para el trasiego de droga controlado por el Cartel de la Sierra.
El único municipio en el que el tema de violencia es destacable, y eso por lesiones y robo de casa, es el de San Marcos, donde opera el grupo armado de la UPOEG, que dirige Bruno Plácido Valerio.